¡Joder! despotricó, completamente confundido.
Bienvenido al EIP (N. del T.: EIP, Equipo de Investigaciones Paranormales) dijo Storm sentado detrás del escritorio. Él había estado esperando que ocurriera esto y se esforzó para no sonreír.
¿EIP? preguntó Vincent, dándose la vuelta para localizar de donde provenía la voz. He oído hablar de vosotros, pero nunca pensé que tendría la oportunidad de conocer a ninguno.
Pues vas a poder conocer a unos cuantos de nosotros, y Ren ha sido el primero le dijo Storm.
Vincent se puso rígido cuando mencionó a Ren. No es de extrañar que este gran imbécil esté tan seguro de sí mismo. Tiene a todo un ejército para protegerle.
Storm dejó de sonreír. Ren no necesita de un ejército, pero esa no es la razón por la que te he traído aquí.
Entonces, ¿cuál es la razón? preguntó Vincent, poniéndose impaciente. Necesitaba regresar junto a Lacey y asegurarse de que ella estaba a salvo.
Si has terminado de fingir el ser un esclavo de los demonios, quiero que te unas al EIP dijo Storm, yendo al fondo de la cuestión. Tus habilidades te hacen que seas perfecto para unirte al EIP y así podremos tratar tu leve adicción.
Vincent miró fijamente al otro hombre. ¿De qué adicción estás hablando amigo?
A esa que estás enganchado, la de buscar una manera para que te maten respondió Storm sin pestañear. Te aseguro que, si te enfrentas a los demonios junto a nosotros, hay muchas posibilidades de que se pueda solucionar.
Todo eso suena muy bien, pero creo que no voy a aceptar la oferta. La única razón por la que estoy en esta maldita ciudad es por Lacey, y dejarla a solas con ese demonio de ojos plateados no está dentro de mis planes dijo Vincent empezando a ponerse nervioso.
En el fondo, Ren es humano, lo que significa que sangra tanto como tú le corrigió Storm. Los dos tenéis mucho en común ya que ambos tenéis poderes excepcionales. Mientras tú, tienes la capacidad de revivir de cualquier lesión incluyendo la muerte, Ren tiene la capacidad de desviar los poderes de cualquier tipo de criatura sobrenatural que esté dentro de su rango de alcance. La hostilidad que tienes hacia Ren no tiene fundamento, él no es de la raza del Caído explicó.
La mirada de Vincent se ensombreció ¿Qué sabes tú del Caído?
Sé lo suficiente dijo Storm enigmáticamente.
Así que, su secuestrador es un gran entusiasta de la melancolía y la amargura, fantástico. En su opinión, eso es justo lo que lo convertía en un maldito idiota.
Si Ren puede desviar los poderes de los que le rodean, ahora tiene mucho trabajo, pues la pequeña tienda de magia en la que están está ahora mismo rodeada de demonios dijo Vincent. Él no parecía estar muy equilibrado cuando me sacó de allí, pues creo que tenía todas las intenciones de calcular el tiempo que me tomaría revivir tras romperme el cuello.
Revivir te hubiera llevado veinticinco minutos y trece segundos dijo Storm sonriendo al ver como Vincent se quedaba perplejo. Encogiéndose de hombros siguió diciendo: Tenía que pasar para que así yo supiera el momento adecuado para poder aparecer. Por lo visto sabes bien qué teclas pulsar para que Ren se cabree. En cuanto a Lacey, ella está perfectamente a salvo en su presencia.
Perdona, pero no puedo creerte amigo dijo Vincent casi gruñendo sin querer perder más tiempo con estas tonterías. Había conocido una buena cantidad de entidades poderosas y por lo que él sabía ninguna de ellas era capaz de volver atrás en el tiempo.
Depende completamente de ti lo que decidas creer dijo Storm encogiéndose de hombros y sabiendo lo que se avecinaba. Si aceptas unirte al EIP, tendrás la oportunidad de verlo con tus propios ojos.
Vincent negó con la cabeza: No me creo nada. No puedes devolverme al lugar de donde me secuestraste.
Storm tenía la mirada perdida y no prestó atención a su rápido rechazo. Sólo porque te hayas escondido entre los demonios no cambia tu verdadera naturaleza. Una vez fuiste un Caballero de uno de los reinos más poderosos de la historia y has salvado muchas vidas. Protegiste a los débiles de sus opresores y, cuando llegó el momento de tu verdadera muerte, seguiste luchando contra un demonio al que sabías que no podías vencer, y todo porque pensabas que estabas protegiendo a un niño indefenso.
¿Cómo coño sabes eso? murmuró Vincent, mientras el vivo recuerdo volvía a su memoria.
Quizás lo entenderías mejor si me presentara dijo Storm, justo antes de desaparecer.
Vincent se estremeció cuando Storm apareció de repente a su lado agarrándole del brazo y apareciendo nuevamente en un diferente escenario. Para confundirlo aún más, los dos estaban de vuelta en el museo, escondidos en una sombría habitación. Miró alrededor de la sala principal viendo que los demonios aún se estaban preparando para la subasta que obviamente no había ocurrido todavía.
Instintivamente se ocultó aún más profundamente dentro de la oscuridad cuando David entró en la sala seguido por los mismos demonios que lo habían torturado, incluso podía ver su sangre aún fresca en sus manos.
De repente el museo desapareció y lo que les rodeaba era la oficina de nuevo. Me llamo Storm y soy un Caminante del tiempo. Para hacer una completa investigación de los antecedentes de alguien, simplemente busco la verdad por mí mismo.
Los labios de Vincent se fruncieron, se sentía atrapado entre la necesidad de saber más y la necesidad de comprobar cómo estaba Lacey. Un Caminante del tiempo, EIP, esta ciudad se ha vuelto muchísimo más interesante.
Te das cuenta de que aún te empeñas en proteger a alguien más débil que tú, simplemente es tu forma de ser. Hagamos un trato se ofreció Storm, sin arrepentirse por no seguir su propia regla sobre los tratos, ya que ninguno de los dos era un demonio. Iré a recuperar a Lacey ahora mismo si aceptas unirte a nosotros. Después de todo, ella ya es miembro del EIP y ella debe estar aquí con nosotros.
Vincent ni siquiera se molestó en pensarlo dos veces. Sinceramente, en estos momentos, ¿qué podría perder?
Capítulo 2
Ren puso las manos en la espalda de Lacey empujándola hacia él, y haciendo que su calor subiera deliciosamente por los muslos. Empujó su erección contra la mano con la que ella le acariciaba y la besó profundamente mientras emitía un ronco gruñido, sacudiéndose con un erótico ritmo que ella de buena gana correspondía. La mayoría de los demonios se habían marchado, permitiéndole reducir lentamente la sobrecarga de energía paranormal, pero él no estaba dispuesto a dejarla conocer ese pequeño secreto todavía, debido a que estaba atrapado en un nuevo subidón.
Lacey se calmó cuando se dio cuenta de que ya no sentía la espeluznante sensación en su columna vertebral que habían provocado los demonios al otro lado de la ventana. Simplemente el pensar en los demonios le provocó una fuerte reacción, recordándole el hecho de que hace unos momentos, Vincent había desaparecido misteriosamente mientras la abrazaba. La escena volvió a su mente e hizo que se estremeciera.
En el momento en que dejó de cabalgar sobre su muslo y le beso con abandono, Ren la soltó de sus labios y se echó hacia atrás lo suficiente como para mirarla a los ojos. Viendo la mirada de sorpresa que tenía en su cara, bajó su pierna, y dejó deslizar su cuerpo hacia abajo hasta que ella se quedó parada temblando, y tuvo que sujetarla por los hombros para obligarla a no perder el equilibrio.
Sólo intentaba calmarte dijo Lacey sin aliento. Ella deseó en silencio recibir su propio calmante ahora que sus muslos volvían a encenderse en llamas. Intentó cambiar sus pensamientos, y miró furtivamente alrededor de Ren, justo donde Vincent había estado si no hubiera desaparecido. ¿A dónde fue Vincent?
Sólo intentaba calmarte dijo Lacey sin aliento. Ella deseó en silencio recibir su propio calmante ahora que sus muslos volvían a encenderse en llamas. Intentó cambiar sus pensamientos, y miró furtivamente alrededor de Ren, justo donde Vincent había estado si no hubiera desaparecido. ¿A dónde fue Vincent?
Ren se pasó una mano por el flequillo cuando comprendió que sólo lo había besado para distraerlo. Suspiró, tratando de no pensar en que Nick y Gypsy, que aún estaban debajo de ellos, se estaban revolcando como conejos. Sus labios se fruncieron pensando que era el poder de los miembros del EIP del que aún se alimentaba, ya que los demonios parecían haber desaparecido.
Storm se lo llevó le dijo Ren, como si no le importara.
No hizo nada por separarse, lo que aprovechó ella para separarse de entre él y la ventana. Él se quedó mirando la huella ensangrentada de la mano en la ventana y luego se giró para mirarla de nuevo.
¿Se lo llevó a dónde? susurró Lacey, que ahora le daba la espalda. Ella sintió un escalofrío casi imperceptible cuando él se acercó por detrás.
Ren hundió sus labios en su oreja mientras susurraba con voz ronca: Creo que Hades es precioso en esta época del año. Tal vez Storm lo teletransportó hasta allí para pasar unas agradables y largas vacaciones.
Probablemente lo llevó al castillo corrigió Lacey, en un tono un poco alto mientras se giraba para mirarlo de frente y evitar que volviera a hacerlo. Mierda, lo que había hecho casi hizo que se le doblaran las rodillas. Podría habernos teletransportado a nosotros también murmuró, sintiendo que sus mejillas ardían mientras se preguntaba si Storm habría visto como atacó sexualmente a Ren y decidió no interferir.
¿A qué viene tanta prisa? preguntó Ren, que aún no quería que ella volviera con su amante muerto. Él ocultó sin éxito una sonrisa sabiendo que podía convertir ese pensamiento en realidad tantas veces como quisiera considerando que el imbécil sería tan tonto como para revivir una y otra vez.
Lacey miró hacia el suelo, y casualmente volvió a ver a Gypsy y Nick una vez más. Sintió que sus mejillas se volvían a incendiar. Aquí sólo hay una cama y creo que está ocupada. Además, quiero asegurarme de que Vincent está a salvo.
Vincent está bien dijo Storm, y teletransportó a los dos a la misma oficina del castillo antes de que pudiera terminar la frase. Él se volvió a teletransportar rápidamente detrás del escritorio para no estar tan próximo de la ira de Ren por haber sido interrumpido. No era culpa suya que Vincent se hubiera quedado dentro de la zona de peligro sin mostrar ningún miedo.
Veinticinco minutos y trece segundos dijo Vincent, mirando fijamente a Ren.
¿Qué? preguntó Ren, sintiendo como se enfurecía ahora que volvía a ver al mismo idiota.
Ese es el tiempo que me lleva revivir después de romperme el cuello dijo Vincent sonriendo. Lamento haber acabado con tu curiosidad.
Ren no estaba actuando como él mismo dijo Lacey, interponiéndose entre ellos, pero el hecho de que le diera la espalda a Ren hizo obvio a quién estaba buscando.
Vincent vio como Ren esbozaba una maliciosa sonrisa, lástima que Lacey no pudiera verla. Eso le gustaba, sabía cómo manipular cuando tenía la oportunidad. Supongo que Ren no actúa como si mismo bastante a menudo, sabiendo que es un súcubo mientras pasa el rato en una ciudad infestada de jodidos demonios. Yo no me fiaría de él en absoluto.
Bueno, qué pena, ya que esta noche ha ayudado a salvar nuestras vidas insistió Lacey.
No necesito a nadie para que salve mi vida, ¿o has olvidado mi pequeña discapacidad? tronó Vincent, acercándose para poder observarla. Se quedo mirando como sus labios se entreabrían para inspirar con fuerza e inmediatamente se arrepintió porque sabía exactamente cómo herirla profundamente.
Su semblante se suavizó cuando ella extendió la mano como si fuera a rozarle la mejilla, pero el sonoro golpe resonó por toda la habitación e hizo que pusiera mala cara de nuevo. Bien, tal vez se lo merecía, aunque no podía entender por qué.
Eso es por matarte delante de mí, idiota insensible dijo Lacey ásperamente, y después añadió en voz más alta, y sólo porque tú no lo recuerdes no significa que yo te perdone.
Tomo nota respondió Vincent con sarcasmo cuando Lacey se giró sobre sus talones y se dirigió hacia el escritorio donde estaba sentado Storm.
Lacey puso las manos encima de la mesa e inclinándose susurró a Storm. Lo siento, se suponía que no dijera nada sobre eso, ¿verdad?
Storm trató de mirarla a los ojos, pero aun así podía verle a través del escote casi todo su pecho cuando se inclinó hacia adelante con el seductor vestidito que él había elegido para ella. A veces se superaba a sí mismo.
Alguien tenía que contárselo tarde o temprano respondió, y se teletransportó junto a ella, pero ahora frente a los otros dos hombres. Se frotó la barbilla para ocultar una sonrisa cuando Lacey giró lentamente la cabeza para mirarlo sin levantarse desde su seductora posición. Ren, ¿qué tal si completamos la base de datos de la tarea de esta noche?
Ren estaba de repente detrás del escritorio, cosa que sorprendió a Lacey e hizo que ella levantara la mirada para descubrir que no la estaba mirando a la cara. Ella, confusa, bajó la mirada y luego se dio cuenta de lo que él estaba mirando era a sus pechos. Evitando ruborizarse, le dedicó una sonrisa maliciosa antes de levantarse lentamente y darle la espalda.
Storm arqueó una ceja a modo de sorpresa cuando Ren se giró para mirarle de manera acusadora. Ese pequeño regalo para sus ojos no era culpa suya, al menos había sido muy placentero. Volvió su atención hacia Vincent, que seguía de pie pensativamente acariciándose la barbilla y mirando a Lacey.
No quiero hablar de ello le informó Lacey, terminando el interrogatorio incluso antes de que pudiera empezar.
Vincent levantó sus manos en señal de rendición De acuerdo.
¿Aceptaste unirte al EIP? preguntó, suavizando su voz. Tratando de no prestar atención al hecho de que sus mejillas se habían enrojecido debido a su mal genio.
Creo que sí, mi amor respondió Vincent, sabiendo ahora que Storm le había pillado en eso. Obviamente en absoluto había estado en peligro y si fuera así, el Caminante del Tiempo lo habría sabido enseguida.
Escucha, ya te dije que ella estaba bien se defendió Storm encogiéndose de hombros cuando Vincent lo miró con preocupación.
¿Cuál es la trampa? preguntó Vincent, menos molesto por haber sido engañado para hacer un trato que lo uniera a un legendario Caminante del Tiempo y a la escurridiza organización EIP.
Debes tener un socio respondió Lacey rápidamente, recordando el razonamiento detrás de la regla.
¿Te estás ofreciendo? dijo Vincent sonriendo con satisfacción, haciendo que cada minuto que pasaba le gustara más el trato.
No respondió Ren. Ella es mía.
Lacey pestañeó ante el tono posesivo de la voz de Ren, pero no lo desmintió. Miró hacia Storm con curiosidad. ¿Alguna vez ha habido un trío?
No se dio cuenta de lo erróneo de la pregunta hasta que notó que la ceja derecha de Vincent se alzaba y a la vez oyó un gruñido ronco que provenía desde atrás.
Oh cielos, dejarlo estar ya, par de pervertidos. No me malinterpretéis, y vosotros lo sabéis muy bieninsistió Lacey, cruzando los brazos sobre su pecho. Pestañeó de nuevo intentando parar todo tipo de vulgares pensamientos que de repente intentaban convertirse en imágenes y llenar su pequeña y obscena cabeza.