«Me temo que esta vez lo que ha sucedido sea verdaderamente atroz» continuó el keriano responsable.
«Habla, ¿qué ocurre?»
«El laboratorio Πha sido atacado y destruido. Diez millones de almas han sido aniquiladas. Sólo se han salvado novecienta noventa expulsadas, por medio del contenedor (|), pocos momentos antes de la explosión.»
«¿Explosión? ¿De qué estás hablando? ¿Quién ha sido?» la voz, siempre suave y tranquila de TYK, habÃa asumido ahora un tono decididamente mucho más alterado.
«En el sistema central, referencia |^|, puedes ver directamente lo que ha sido grabado desde la cápsula mientras se alejaba del satélite.»
TYK quedó duratne mucho tiempo en silencio mientras miraba una y otra vez las imágfnes capturadas por el contenedor, a continuación desactivó la grabación y dijo «Ese artefácto esférico ha sido diseñado por aquella raza alienÃgena que habita el planeta azul llamado |o|.»
«O quizás por los habitantes del otro planeta que pertenece al mismo sistema solra» añadió el responsable.
«Ha sido un ataque despiadado por parte de esa especie primitiva hacia nuestra raza. Millones de nuestros hermamos han sido aniquilados antes de que puediésemos trasladarlos. ¿Por qué?»
«Hemos pensado siempre que esos seres no representaban ningún peligro para nosotros, aunque yo siempre me he opuesto a la fabricación de Πen su satélite.»
«¿Cuál es el otro planeta del que hablabas?»
«Lo llamamos |O|. Es muy parecido a |o|. Su órbita, sin embargo, es mucho más grande. Efectúa un giro completo entorno al sol cada 3.600 revoluciones de |o| y sus habitantes son de orÃgenes muy parecidos. De hecho, según estudios hechos en su momento, parece ser que los habitantes de |O| han modificado genéticamente algunas especies que vivÃan en |o| para hacerlos semejantes a ellos.»